¡Qué viaje!

Desearía que el mundo entero pudiese ver esto. El viaje andino está lleno de peligros, pero es grato para el viajero. Despierto a las 4:30 am, y me pongo en el asunto de inmediato. Me lavo, me visto, me pongo las botas, cojo mi mochila y salgo. He atravesado tres montañas simplemente maravillosas: en primer lugar las tierras xerófitas de flora desértica, combinaciones incandescentes de fruta y flor que contrastan con el paisaje color beige claro, un país de hadas color amarillo, muy seco, hermosamente agrietado, que esconde de la vista incontables maravillas. Entonces, de repente, estás en el borde de un abismo y la realidad te impacta: que estas a cientos de pies sobre la tierra, y debajo de tus pies, una selva espesa, fría y húmeda te espera, retando a tu valor  a una prueba.  Loros, monos aulladores, armadillos, osos, se pueden encontrar aquí en la espesura. Y salgo del desierto a un camino de tierra con vegetación densa y, después de como 20 minutos de árboles inmensos, enormes, mirando hacia mí, desde todos los lados, asombrado, me paseo por un camino hermoso de casas antiguas, muy bien cuidadas, justo en el medio del bosque. Los jardines son impresionantes. El color, la forma y el olor de la naturaleza esta en todo lo que me rodea, provocando profundos recuerdos que se forman. En una escuela abandonada años antes de que esto fuese declarado un parque, me subo a un árbol de madera oscura, de hojas grandes, de un verde profundo, y bajo unos 12 o 14 frutos amarillos.  Se llaman ” Nísperos chinos “, y su presencia intensamente aromática inunda mi cabeza tan pronto como meto uno en la boca, después de lavarlos en un arroyo cercano. Su dulce sabor carnoso y delicioso me hace feliz mucho, mucho tiempo después de las casas desaparecieron. Una casa pequeña puede ser vista desde aquí, y voces vienen de ella. Estridentes voces de niños riendo. Mientras camino por delante de la casa, una hermosa escena llama mi atención: una madre joven y hermosa, haciendo tareas del hogar, entra y sale de un hogar tranquilo, humilde.  En el patio de enfrente, una niña de 4 años de edad juega con su hermano mayor, de 6 o 7 como máximo. Corren, paran y se ponen en cuclillas. Luego de vuelta de nuevo, al ritmo de una canción que no alcanzo a entender. Sus formas en contra de la luz de la mañana hace brillar sus siluetas, como si la luz fuera agua en este mundo de maravillas que visito.   Muy dulce, en verdad delicioso es este trópico, y de personas a frutas, hay  tanto que ver aquí, tanto para vivir aquí!  Al fin llego. El camino sigue y sigue, pero un trecho casi invisible se abre paso a través de la espesura de la selva, a la derecha.  Allá abajo, a 40 minutos selva adentro, el río ruge, forma cascadas, y venados, tigres, peces raros, aves, flora y fauna esperan al espectador. Me tomo un momento, y tomando aliento, me lanzo cuesta abajo, sonriendo a través de los árboles centenarios, enormes, dando gracias a Dios que Guruplayer.com existe.

¿Como que  “¿qué diablos tiene que ver guruplayer.com con todo esto?”

Como cuernos crees que gané el dinero para el viaje?

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